La alimentación de las familias menonitas es muy variada y bien balanceada: por lo general comen lo que ellos mismos producen, aunque también compran algo de comestibles en los almacenes que existen dentro de la colonia, o en comercios de los pueblos o ciudades que visitan.
Cocinas de leña donde prácticamente incineran toda la basura que se produce, por esto las calles de las colonias y los patios y jardines de las casas lucen sin basura. La cocina de leña se mantiene encendida prácticamente todo el día porque además de que sirve para cocinar (dicen ellos que el agua caliente nunca sobra en una casa), sirve también en el invierno para mantener una temperatura agradable dentro de ella. no obstante, en la colonia pampeana y por el clima, están las cosas con estufas a gas que es provisto en grandes zepelines que cada menonita tiene para uso propio.
Los alimentos que más comúnmente consumen son: exquisitos jamones, elaborados con los cerdos que ellos mismos crían, además de tocino, chuletas de cerdo, y demás derivados del cerdo. Pan de trigo o de avena integral, ensaladas frescas o de verduras en conserva, mantequilla, requesón, queso, lentejas, garbanzos, arroz, dulces y mermeladas de fabricación propia, distintos tipos de masitas y panes.